Feliz año para las fuerzas de seguridad y anno horribilis para los bandoleros de la comarca fue el 1907. La alegría de unos es la tristeza de otros. Uno detrás de otro van cayendo como las fichas de dominó.

            Tan sorprendente es el estado de bandolerismo que vive Andalucía en estos primeros años del siglo XX que un corresponsal de un diario madrileño visita a Reverte y Pepino Chico en la cárcel de Córdoba donde están siendo juzgados por sus numerosas fechorías.

?BANDOLEROS. EN BUSCA DE PERNALES.- Ha permanecido algunas horas en esta capital el redactor del periódico madrileño "España Nueva" que oculta su nombre bajo el seudónimo de Capitán Tormenta, quien se propone recorrer los lugares donde tiene establecido su campo de operaciones el célebre Pernales para enviar a dicho periódico una extensa información acerca del bandolerismo en Andalucía. En Córdoba ha estado en la cárcel visitando a Reverte, Pepino chico y otros antiguos compañeros de Pernales, y de nuestra población ha salido acompañado de un fotógrafo?. (Diario de Córdoba, 1907).

            El primero de esta lista es el apodado Chalecón, un ex guardia municipal a quien el mísero sueldo no le llegaba a final de mes y tuvo que buscarse horas extras para ayudar a la economía familiar. Lo detienen por primera vez en 1899 y la segunda y definitiva en este 1907 famoso.

?DETENCIÓN.- En Fuente-Tójar ha detenido la Guardia civil al vecino de dicha villa Antonio Alba López (a) Chalecón, guardia municipal de la ciudad de Priego, por haber estafado a don Antonio Roldán Escobar, vecino de la aldea de Zamoranos, doscientas cincuenta pesetas, ocupándole en el acto de la detención una escopeta y una pistola?. (Diario de Córdoba, 1899).

?BANDIDO QUE SE ENTREGA.- A las dos de la tarde del lunes próximo pasado, uno de los ladrones que merodeaban entre Fuente-Tójar, Alcaudete y Luque, llamado Antonio Alba López (a) Chalecón, no pudiendo sufrir la persecución de la Guardia civil, que lo estrechaba cada vez más, se presentó al Alcalde de Fuente-Tójar. Éste avisó al puesto de la benemérita y por una pareja de ella le hizo conducir a la cárcel de Priego, donde quedó incomunicado y a disposición de la autoridad militar. El aludido Chalecón había hecho bastantes peticiones de dinero a ciertos propietarios de esta región, por cuenta propia unas veces y otras a nombre de Pernales.      

            Se espera haga revelaciones de interés.

            El corresponsal. Priego, 17?. (Diario de Córdoba, 1907).

            Si ya un Pepino hacía gazpacho de acompañamiento junto al Pernales tras las rejas del penal cordobés, para que el típico plato andaluz estuviera completo faltaba el otro Pepino que en estos días estaba a punto de maduración, es decir, de ser apresado. Si bien seguían sus fechorías por caminos y sierras, Pepino  y Rebeca, en alguna ocasión aprovechando las sombras de la noche volvían a descansar a sus casas de Fuente Tójar. Un grupo de vecinos conocedores de esta circunstancia y que habían sido objeto de robo por parte de ellos estuvieron al acecho y lograron cazar las piezas aunque no completamente:

?DESDE PRIEGO.- CAPTURA DEL BANDIDO PEPINO.-  Cerca de  la media noche del 31 de diciembre próximo pasado, en la vecina población de Fuente-Tójar, ha sido capturado, en circunstancias bien originales, el aludido ladrón, uno de los que formaban partida de ya preso Reverte.

            Hallábanse a la sazón reunidos a la entrada del pueblo los vecinos del mismo Antonio Leiva (a) Bacalao, Julián Barea, Francisco Moral y Francisco Mérida cuando vieron venir hacia ellos al Pepino y a su compañero Rebeca, que se dirigían seguramente a pernoctar en sus domicilios.

            Como diera la circunstancia de que los indicados vecinos habían sido robados no ha mucho tiempo por la partida de Reverte, en justa represalia a este hecho quisieron aprovechar la ocasión del encuentro, y, por mutua y espontánea inspiración, se arrojaron súbitamente todos ellos sobre los dos bandidos, que, aunque intentaron defenderse, no lo lograron, y sólo puedo escaparse el  Rebeca en la refriega, pero no el Pepino, que fue preso y conducido a casa del alcalde.

            Fue avisada a seguido la Guardia civil de puesto, quien se hizo cargo del preso, el cual ha sido conducido y encarcelado en la de Priego.

            En esta ciudad se supo el hecho extraordinario ayer por la mañana, pero no di cuenta al DIARIO, del hecho hasta que llegarán a Priego en evitación de posibles sorpresas. El Corresponsal. 2 enero 1907?. (Diario de Córdoba, 1907).

            En el acto de la captura le fueron ocupadas una carabina Rémington y una pistola de dos cañones.

            Como ?a rey muerto, otro en su puesto?, Rebeca, siguió sus andanzas con nuevos refuerzos como El Zorro y El Quinquillero de corta vida delictiva, pues fueron pronto invitados a la cárcel por las fuerzas del orden:

?BANDOLEROS. CAPTURA DE UN BANDIDO.- A la presentación en Fuente-Tójar del bandido Chalecón, ha seguido la captura de otro de los individuos de la partida de Rebeca, llamado Manuel Ayala Barea (a) El Zorro, llevaba a cabo por la fuerza de los puestos de dicha villa y de Priego, al mando del teniente jefe de la línea.

            Al detenido se le intervino una escopeta de dos cañones de fuego central y veintisiete cartuchos cargados con balas. El detenido ahora, en unión de Chalecón y Rebeca, robó no hace mucho 1.000 pesetas al vecino de Priego don José Serrano. La mayoría de los robos efectuados por esta cuadrilla de ladrones los hacían fingiendo uno de ellos ser Pernales. También ha detenido la Guardia civil, como encubridores de los bandoleros, a Sebastián Expósito y Juan Pérez Velasco, interviniéndoles varias armas blancas y de fuego en el acto de la detención?. (Diario de Córdoba, 1907).

?BANDOLEROS. CAPTURA DE UN CRIMINAL.- El individuo apodado el Quinquillero, detenido hace varios días en Priego, según nos comunicó nuestro activo corresponsal, llevaba algunos meses de residir en dicho pueblo, dedicándose al acarreo de orujos. En las inmediaciones de Alcaudete sembró el pánico con sus continuas hazañas de bandolero de oficio. Unido a Rebeca y Colomo cometió innumerables robos y crímenes, entre los cuales figura, según la declaración del sujeto detenido en Huetor-Tájar, el asesinato de una pareja de la Guardia civil en Valenzuela. El Quinquillero será conducido en breve a la cárcel de Córdoba?. (Diario de Córdoba, 1908).

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