Por Enrique Alcalá Ortiz
n las fiestas navideñas, queramos o no, intensificamos las relaciones entre la familia, amigos e instituciones con los que normalmente tenemos contacto. Los usos sociales nos llevan, nos encadenan y nos transportan a desearnos unas fiestas donde la felicidad, la paz, la alegría y la salud, (entre otras aspiraciones), se implanten en nuestras vidas no sólo en los días pascuales, sino a lo largo de todo el año nuevo. ¿Pero qué nos decimos? ¿Cómo lo expresamos? ¿Con qué medios lo hacemos? Contestar escuetamente a estas preguntas es lo que pretendo. Para eso me he permitido transcribir lo que tengo más a mano: los mensajes que por diversos medios recibí el año pasado. Cómo es lógico, excepto los poemas que pongo la autoría, todas las felicitaciones permanecen en el anonimato, puesto que sus autores nunca pretendieron publicarlas.
Sin embargo, esta costumbre en la provincia de Córdoba tiene algo más de un siglo de vigor veamos lo que nos decía del Diario de Córdoba el día 3 de enero de 1891: "Costumbres.- Se ha generalizado en Córdoba la de intercambiar tarjetas el primero de año las personas que se estiman. El jueves fue ya notable el incremento de esta costumbre que hace años era casi desconocida en Córdoba".
Este año he comenzado a recibir felicitaciones a través del correo electrónico si bien es verdad que han sido pocos los e-mail, es fácil deducir que en los años venideros éste será el medio más usado para las felicitaciones de Navidad. La comodidad, baratura, rapidez y la versatilidad de poder enviar centenares de felicitaciones con sólo apretar un botón es un incentivo que cada vez usaremos con más frecuencia. Ya hay archivos en Internet que te facilitan tarjetas a la carta, así como frases y poesías para que no te des mucho trabajo en pensar qué puedes decir.
Esta innovación ha venido a sumarse a la habitual llamada por teléfono, hasta ahora lo más cómodo, y al normal saludo cara a cara, si bien, el método más usado desde hace unas décadas es la tradicional tarjeta postal. Tarjetas hechas en imprentas profesionales, confeccionadas en el ordenador o compradas en las librerías. Con frases de imprenta o manuscritas. Tarjetas simples o dobles, silenciosas o con música. Las que más abundan son las tarjetas compradas en las librerías con un dibujo profesional, de colores, frecuentemente editadas para ayudar a asociaciones benéficas como Unicef, Acción contra el hambre o Cáritas; no faltan las de diseño estándar de una imprenta; tarjetas con vistas de las ciudades de procedencia; cuadros de museo del Prado como ?La Adoración de los Reyes? de Luis Morales; de diseño modernista que nada tiene que ver con la Navidad, pero sí con la parafernalia de los regalos; de artistas como Emilio Serrano; de pintores consagrados en la localidad, como Vicente Torres; dibujos infantiles, verdaderas obras maestras como la del Juan C. Fuentes; son abundantes las ilustraciones de artistas discapacitados pintadas con la boca o con los pies; fotos de nacimientos o belenes; la imagen titular de su cofradía o hermandad, como la Columna; dibujos de murallas; no es raro que junto a la tarjeta de felicitación se acompañe de una revista con algún artículo del remitente o excepcionalmente un libro; aunque lo más original este año ha sido un grabado de Manuel Jiménez Pedrajas, enviado por la Asociación de Pintores de Priego en el que se ve un caballete con un cuadro de una vista del Adarve.
Nuestros deseos vienen expresados en una palabra simple o en largas frases. Expresiones lacónicas y locuciones cortas como Felicidades, Muchas felicidades, Salud y paz interior, Felicidades para ti y los tuyos. Siempre. Un abrazo. Paz, felicidad en estas fiestas entrañables, Felices Pascuas y salud para el próximo 2001, (...) Os deseamos felices fiestas y un Año Nuevo lleno de Paz y Felicidad, (...) gracias por tu felicitación. Yo también os deseo paz, felicidad y todo lo mejor para el naciente, enigmático, pero esperanzador siglo XXI, (...) tanto yo como toda mi familia os deseamos paz y alegría y un feliz 2001, se unen a la clásica frase hecha: Feliz Navidad y Próspero Año Nuevo.
Otras relatan los regalos entregados: Enhorabuena por el cuaderno-libro "El viejo olivo". Y gracias por el ejemplar. Y que paséis una Feliz Navidad y tengáis lo mejor en el 2001, Muchas gracias por vuestra felicitación y por el libro. También yo os deseo a vosotros unas felices Navidades y una feliz entrada en el Nuevo Año y en el Nuevo Siglo.
Se interesan de noticias personales y nos desean éxito: (...) con paz, amor y alegría con muchos frutos literarios. ¿Qué es de vuestra vida? Cuéntame, pues al no poder ir a Priego, me gusta saber de los amigos.
Hablan en nombre de ellos o de toda la familia: (...) tanto mi gente como yo os deseamos una feliz Navidad y un genial Año Nuevo.
Algunas llevan un mensaje cristiano filosófico, con la intención de sacar consecuencias morales y enseñanzas: Cada vez que decimos si el hombre tiene problemas y necesidades y somos capaces de entenderlo, sin saberlo, hacemos Navidad. Y ya hay un motivo para hacer fiesta. Felicidades.
Copian trozos enteros de los Evangelios: Esto tendréis por señal: encontraréis un niño envuelto en pañales y reclinado en un pesebre. Al instante se juntó con el ángel una multitud del ejército celestial, que alababa a Dios diciendo: Gloria a Dios en las alturas y Paz en la tierra a los hombres de buena voluntad. (San Lucas, 2, 10-14).
Citas de escritores clásicos: En ninguna parte está el que está en todas. (Séneca, Epis, 2,2.)
Otros, después de mensaje, traen un deseo especial dentro de una plegaria: Nuestro testimonio de amistad, unido a nuestros mejores deseos de paz, amor, salud y felicidad para estas Navidades y para el próximo año y siguientes. ¡Qué Dios os bendiga ahora y siempre!
Algunas nos recuerdan el hermoso pueblo en el que vivimos, blanco como una paloma y lleno de olivos: Con el corazón siempre puesto en esa querida tierra del Barroco y los viejos olivos, os deseamos unas felices Navidades y que el año que viene sea con vosotros tan generoso como merecéis (...)
O el pueblo de donde proceden: Que el divino Niño te dé en su Natividad y te traiga en su Epifanía la paz que mereces y necesitas para afrontar el XXI que es el deseo desde este lugar de la Mancha (...)
También sirven para comunicar una noticia, aparte de la normal felicitación: (...) Para el próximo año en el puente de 1º de mayo, si no ocurre algún imprevisto, estamos invitados en Doña Mencía a una boda, y aprovecharemos para haceros una visita. Felicidades para el próximo milenio.
Asociaciones, hermandades, parroquias, cofradías y organismos públicos suelen tener impresas la felicitación y la misma tarjeta sirve para todo el grupo de sus felicitados. Entre otras cosas, nos han dicho: Nos llega el Príncipe de la Paz, que su espíritu les cubra de alegría y felicidad. Un abrazo; Lo que conduce y arrastra al mundo... no son las máquinas sino las ideas. Víctor Hugo. Feliz año 2001; en estas fechas tan entrañables, aprovecho la ocasión para enviaros mis más afectuosos deseos de Paz y Felicidad para el Nuevo Año; la Archicofradía les desea en estas Fiestas tan entrañables paz y felicidad; la Coral ?Alonso Cano de Priego y en su nombre el presidente, quiere desearle en las Fiestas de Navidad y Año Nuevo a usted y a los suyos, los mejores deseos de Paz, Prosperidad y Felicidad para el año nuevo; muchos regalos y un mismo mensaje... paz, felicidad y un próspero año 2001; Dios nace siempre y muere. Depende del hombre. Feliz Navidad, amigos. Mi abrazo y mi felicitación Navideña y de Año Nuevo más entrañable. Mi gratitud y aliento para seguir en la brecha. Albasur, aprovecha la ocasión para difundir sus objetivos: Tenemos un sueño. Tenemos una visión de futuro. Tenemos una esperanza. Nuestra ilusión es vivir en una sociedad donde se celebren las diferencias, una sociedad donde se nos valore por lo que somos. Que la luz de esta estrella nos guíe a todos para conseguirlo y la de Payaso sin techo de asociaciones que ayudan a los indigentes callejeros.
A la belleza y colorido de las composiciones pictóricas, se unen los poemas de poetas actuales con temas navideños o sin contenido pascual. Desde la región levantina Amador Griñón i Guzmán compone:
(...) Es noche honda, con luna clara, estrellada,
que hasta las sábanas del alma orada,
y bajo la sonrisa un beso de paz trae.
Es la noche donde todos los vientos soplan de oriente,
y una nueva estrella nace en el campo del firmamento
que lleva en los ojos un fuego que reconforta (...)
La de la Real Academia, siempre selecciona selectos textos. Este año nos regala unos versos del laureado poeta Manuel Gahete:
En ti, por ti pervivo, anclado en la marea
donde quieras llevarme
porque sólo a tu lado,
asido a tu cintura, a tu pecho, a tu vientre,
he soñado en un cielo
donde el tiempo no existe.
La primera autoridad municipal, aprovecha la ocasión para hacerle propaganda a nuestro producto de la denominación de origen con unas seguidillas de la poetisa de Castil de Campos, Antonia Jurado Serrano:
Dale a la vara, niño,
dale a la vara,
que la aceituna sueña
con la almazara.
¡Quién lo dijera,
que siendo ella tan negra
rubio saliera!
Aceite claro.
Ya casi no me acuerdo
de mi trabajo.
En la tinaja
¡qué aroma de milenios
deja en mi casa!
Desde Montilla, el Cronista Oficial, Enrique Garramiola nos manda un corto romance de entresacamos:
Siquiera por una vez
vale encender la palabra...
Siquiera por una vez,
por la paz y la esperanza.
(...)
Con dolor o desengaño
vale encender la palabra,
con el amor solidario
por la paz y la esperanza.
Carlos Valverde Castilla, acostumbra en esta ocasión a componer magistrales villancicos:
(...)
Revuelo en la madrugada:
ha nacido Jesucristo
de una virginal muchacha.
Dos mil pastores le aclaman
en el Portal de Belén
con dos mil corderas blancas.
Veinte siglos se entusiasman
al ver a Hijo de Dios
acostadico entre pajas.
Sin darle mucha importancia
Dios estrena otro milenio
con las claritas de alba.
Para no quedarme atrás en este movimiento poético de matiz navideño, finalizo con esta décima para desear felicidades a todos en estas Pascuas del 2001, poema que este año ha tenido a bien poner en sus felicitaciones la Real Academia de Ciencias Bellas Letras y Nobles Artes de Córdoba:
Quiso el Dios del cielo un día
mirarse en una patena
y bajó la Nochebuena
para hacerla Epifanía.
Quiso a la Virgen María
escogerla de santuario.
Para tan gran dignatario
un arcángel le mandó
y al momento se encarnó
en tan sublime sagrario.