CONSEJO PROVINCIAL.- Componentes del Consejo Provincial: Vicepresidente: Excmo. Sr. Duque de Almodóvar, Diputado Provincial y propietario. Vocales, Sr. D. Antonio Castilla, Diputado Provincial y abogado. (...) (Renuncia a la gratificación que le pueda corresponder por el tiempo que desempeña el cargo en beneficio de la Provincia.) (1856). 

ELECCIONES.- Por el de Priego, D. Francisco María de Castilla por 257. (1857). 

ALCALDES.- Han sido nombrados por S.M. la Reina para el bienio que concluye en fin de 1862 los siguientes: (...) Priego a don Rogelio Serrano Pérez. (1860). 

SUCESOS DE LOJA.- Continuamos en la más absoluta carencia de noticias recientes de la sublevación. Es probable, según las que en otro lugar publicamos, que a estas horas la ciudad de Loja y sus contornos gocen del reposo y tranquilidad que por un momento perdieran. A continuación insertamos las siguientes noticias que pudimos adquirir ayer a última hora, y por ellas se verá el buen espíritu y patriotismo de que se hallaban animadas las autoridades y poblaciones todas de nuestra provincia.                                     

         "El alcalde de Benamejí, don José Ariza, no sólo ha conseguido con una habilidad que le honra, guardar el orden, sino conserva sus comunicaciones con los jefes de columnas, cooperando con actividad al buen éxito de la jornada.                     

         En Lucena se reunieron el día primero del actual quinientos propietarios, bajo la presidencia del alcalde constitucional y ofrecieron todos sus personas, sus dependientes y el numerario que fuese preciso para organizar una fuerza de dos mil hombres que persiguiesen a los rebeldes hasta su exterminio.                                                                     

                          El alcalde de Priego sabedor de que un grupo de sublevados se acercaba a su término, formó una partida con todos los vecinos que tenían armas y la Guardia civil, y salió a su encuentro.                  

         Los jueces de primera instancia de todo el territorio han dado también muestras de celo y patriotismo. El de Archidona se apresuró en los primeros momentos a sacar de la cárcel y llevar a Granada a los presos de la causa que estaba instruyendo por la misma conspiración y el de Loja tuvo el valor de salir de la ciudad y unirse a las primeras tropas que encontró. El corregidor no pudo evadirse. Los gritos que daban los rebeldes en Loja eran tan exagerados y revolucionarios, que el mismo albéitar trataba de contenerlos aunque inútilmente.                                    

         Los rebeldes están muy mal armados, pero los promovedores del alzamiento han sabido inspirarles tal fanatismo que no será extraño que perseveren en defenderse cuando sean atacados. La población de Loja estaba el lunes alarmadísima, ansiando que se le presentase el medio de provocar ella misma el desenlace. El albéitar ha abierto cinco enormes trincheras. Una en la carretera por la parte de Málaga, otra en la misma por la de Granada, dos en la izquierda de la ciudad sobre el río y otra entre la parte alta y baja." (1861). 

SUBLEVACIÓN EN LOJA.- Hemos visto la siguiente carta que escriben de Rute, con fecha del 8: "Querido hermano: en respuesta a la tuya te digo, que mi hijo venía del Salar el día que se pronunció Iznájar, en Balerma (Balerma esté entre Loja e Iznájar) se encontró a herrador de Loja, Pérez con unos quinientos hombres, unos con hoces con hondas, y otros con escopetas. En lo alto de Balerma se pararon hasta otro día, a esperar a los que habían mandado desde Iznájar a recoger a todos los cortijeros, pues eran pocos los que no estaban apuntados. Desde la primera noche comenzaron a desertarse, y hoy están todos en sus casas, pero no ha quedado ni un bigote ni una barba, y parece que ha tomado quince día la rúa, según han venido de mal color, dejándose por ahí los trastes de pelear; hoy pasa el Juzgado de aquí a Iznájar, según entiendo, por orden de la Audiencia. Aquí no ha habido más que pasar tropas de Sevilla para Loja y todas las noches hemos visto más de 100 hombres de retén armados de escopetas y con avanzadas hasta el río, término de jurisdicción de este pueblo de Iznájar. Están los pobres diablos cortijeros que no se atreven a dormir bajo de techado. Unos decían, viva la República, otros la sal libre, otros que ya no se paguen contribuciones, las cajillas a dos cuartos, otros que Dios le dejó toda la tierra a nuestro padre Adán, y que descendiendo todos de él debemos ser iguales en fortuna. En fin, un hato de disparates.                                                               

         Lucena, Cuevas, Cabra y Priego, todos se armaron y previnieron por si venían. Si se hubieran escurrido por Rute, algunos habrían ya visto las barbas al Padre Eterno, y se hubieran ahorrado ir a Loja".

         El secretario de redacción. Isidoro Badía. (1861). 

PRISIONES.- En la noche del 16 fue capturado en la villa de Priego por la fuerza de la Guardia Civil al mando del sargento segundo Francisco Contreras Gil, jefe de puesto, y por disposición del alcalde don Rogelio Serrano, Francisco Camacho Sobrado, vecino de Iznájar y natural de Algarinejo, quien según parece, es el segundo jefe de los que en dicha población de Iznájar tomaron parte en la rebelión del 29 del pasado, y que fue a Loja con Pérez del Álamo, siendo uno de los que más se han distinguido en aquella población mientras permanecieron los rebeldes en ella. El preso tiene malos antecedentes, pues ha sufrido una condena de diez años de presidio y ha sido encausado en varios juzgados. Las autoridades, según parece, van a remitirlo a Loja. (1861).

1022 Veces visto - Versión para Imprimir