GUARDIA CIVIL.- La de Fuente-Tójar da cuenta de haber detenido en la aldea de Castil de Campo, término de Priego, a Catalina Hidalgo Torres y Laureano Montes Granados, presuntos autores del hurto de un bolso que contenía dieciocho pesetas y cincuenta céntimos en calderilla, de la propiedad de Antonio Navarro Gómez, vecino de Baena. (1900). 

ECLIPSE. ECOS DE LA PROVINCIA. (De nuestro corresponsal) PRIEGO.- 1º JUNIO.- Pasó el día 28 de mayo, y presenciamos el eclipse de sol, gracias a un hermoso día primaveral y a que no había en todo el horizonte una nube que pudiera servir de inconveniente a la realización de nuestros deseos.

         Una hora antes de la señalada, estaban en las azoteas y puntos más elevados de la población ocupados por personas ansiosas de presenciar el fenómeno pronosticado. Llegó el momento crítico, y todas las miradas se fijaron en el rey de los astros, presenciando cómo se oscurecía, cómo perdía su hermosa claridad.

         Aquella visión duró un solo momento, durante el cual pudimos observar dos estrellas, o mejor dicho, dos planetas y no a mucha distancia, (aparentemente por supuesto) del Sol.

         Al decir que la visión duró un solo momento, nos referimos únicamente al momento en que advertimos aquí la oscuridad que nos permitió ver aquellos dos planetas; pues desde que empezó a notarse el eclipse, hasta que terminó, duró más de hora y media. ONTIVEROS. (1900). 

DRAMA SANGRIENTO.- Disputando hoy a las seis de la tarde en el  matadero público Francisco Muñoz y Agustín Garrido (a) Pollines, vinieron a las manos y el Garrido dio una tremenda puñalada al Muñoz, de resultas de la cual murió enseguida.           

         El Garrido también ha resultado gravemente herido, según dicen, por un hijo del difunto que llegó en aquellos momentos al lugar del suceso.

         ONTIVEROS. 1 agosto de 1900. 

AGRESIÓN. ECOS DE LA PROVINCIA.- (De nuestro corresponsal).- PRIEGO.- 26 agosto.- Serían próximamente las seis de la tarde cuando al regresar a la ciudad por el camino de la Vega los braceros Isidro González Jurado y su hijo Luis González Serrano fueron acometidos por otros dos o tres individuos que, tal vez en estado de embriaguez, dispararon armas de fuego sobre ellos, resultando padre e hijo heridos, el primero en la cabeza y el segundo en una mano y una pierna atravesada por una cápsula.

         El estado del padre, según me dicen, reviste alguna gravedad, aunque el médico señor Entrena ha extraído con acierto la cápsula alojada en la cabeza.

         Los autores de la agresión, después de hacer tres o cuatro disparos, continuaron el camino hacia el partido de huertas llamado Azores, que es donde residen.

         ONTIVEROS. (1900). 

BUEN SERVICIO.- La benemérita del puesto de Priego acaba de prestar un excelente servicio. El día 10 de mes actual supo que en una de las principales casas de aquella ciudad trataba de cometerse un robo y acto seguido empezó sus trabajos para descubrir a los ladrones, dando aquellos por resultado la captura, en el domicilio de José Castillo, donde estaban ocultos, de los licenciados de presidio Antonio Parra Vilar y Manuel Pérez Pérez, vecinos de Granada, que hallaban preparando las herramientas para verificar el robo. Registrada la casa se encontró la Guardia civil una ganzúa, catorce llaves de diversos tamaños, un hierro de aplicación desconocida, un destornillador, dos pistolas y dos cuerdas de cáñamo. Dicho individuos y efectos quedaron a disposición del Juzgado. (1900). 

ROBO. ECOS DE PRIEGO.- (De nuestro corresponsal).- Con el propósito de hacer que resplandezca la verdad tengo que rectificar hoy una de las noticias que di en mi última refiriéndome al robo verificado en el Círculo de Obreros.

         Mal informado entonces dije que uno de los servidores de dicho casino había sido preso por sospecha de que fuese el autor del robo; pero después me he enterado de que no ha sucedido así y que el preso ha sido otro individuo que no es sirviente del Círculo ni lo ha sido y que ya se ha probado que el tal sujeto es el verdadero autor del hecho sin que tenga complicidad con ninguna persona de las que allí sirven.

         Con el fin de que no padezca en nada el buen nombre de los sirvientes de referido centro, lo hago así constar con sumo gusto, para que la verdad quede en su lugar.

         ONTIVEROS. 18 septiembre 1900. 

ECOS DE LA PROVINCIA.- (De nuestro corresponsal).- PRIEGO.- ROBO EN PROYECTO.- El día trece por la noche se llevó a cabo un robo en el Círculo de los Obreros, consistente en unas doscientas pesetas, pertenecientes al conserje de aquel centro.

         Según me he informado, después que aquel casino quedó cerrado a las altas horas de la noche, salió el conserje para ir a su casa, como tiene de costumbre, y a la mañana siguiente se encontró con las puertas abiertas, incluso la de la calle, notando la falta de unos cuarenta duros.

         Se supuso que el autor del robo quedó en el casino sin ser visto y que conociendo bien la casa, tomó el dinero y salió bonitamente abriendo la puerta de la calle.

         Se ignora quien sea el caco, aunque por sospechas han puesto en la cárcel a uno de los sirvientes.

         También hace cuatro o cinco días que la Guardia civil de este puesto sorprendió a dos sujetos en una casa, los cuales se hallaban bien provistos de llaves, ganzúas, escalas y no sé cuantas cosas más, propias para llevar a cabo ciertas fechorías. Estos dos individuos, que no son de aquí ni nadie los conoce, han declarado que iban a hacer un robo de acuerdo con el dueño de la casa donde fueron cogidos y con otros dos que ellos no conocen.

         En atención a esta confesión, la benemérita puso también a la sombra al citado dueño de la casa donde se albergaban, pero este individuo niega lo que los otros aseguran.

         Este acontecimiento ha dado aquí motivo a muchos comentarios y suposiciones referentes a la casa que iba a ser objeto de saqueo y a los otros dos de quienes se ignoran los nombres, pero que se cree que serán de aquí.

         Aguardando alguna luz que aclarase los hechos no he escrito antes; pero por hoy nada más puedo decir.

         Lo que sí es cierto que si siguen así las cosas no sé quien saldrá de su casa cuando sean las diez de la noche en el invierno próximo.

         Hay que tener en cuenta que en esta ciudad hechos de esta índole tienen mayor importancia por aquello de que no son corrientes.

         ONTIVEROS. 15 septiembre 1900.

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