© Enrique Alcalá Ortiz

                    Carcabuey, la cercana localidad de Priego, vive la fiesta de Carnaval con una particularidad muy distinta a las de las poblaciones que la circundan, porque estas carnestolendas desmadradas tienen lugar en la Pascua de Resurrección, es decir, al terminar la Cuaresma. Parece que esta comunidad quiere contradecir con esta frase: en todos los lugares celebran el Carnaval antes iniciarse la Cuaresma, nosotros lo haremos al terminar. Hasta ahora, a pesar de los esfuerzos de los investigadores, no se ha documentado la causa que ha motivado esta anomalía, si así podemos calificarla, en el calendario normal de celebraciones.

                    Un caso parecido nos los encontramos en la localidad de Castil de Campos, entidad autónoma de Priego. Allí la Candelaria, se celebra unos meses antes de febrero. Según cuentan por tradición, durante estas fiestas se produjeron en una ocasión unos sucesos sangrientos y para olvidarlos, y evitarlos, se trasladaron de fecha.                   

                    Siguiendo la tónica general, de Carcabuey sólo hemos conseguido cuatro noticias, correspondientes todas a las primeras décadas del siglo XX. Pocas, pero con sustancia, estimamos.  En la primera nos enteramos de la singularidad de esta Fiesta de los Moraos, es decir, un carnaval, al que podríamos llamar glorioso: ?Han transcurrido los días de Pascua de Resurrección con el mayor orden y sin tener que lamentar incidente alguno desagradable a pesar de abundar en esos días las máscaras, único caso en España en que el carnaval se traslada a mencionada festividad.

                    La afluencia de forasteros con dicho motivo ha sido grande, y muy especialmente de la inmediata ciudad de Priego, de donde han asistido varias señoritas muy guapas?. 

                    La siguiente es de gran contenido histórico. Nos dice el inicio de la fiesta en los normales días del Carnaval, siendo por primera vez, cuando se nombran a los coros de tanta incidencia y desarrollo en toda la comarca, además de unas notas muy documentadas sobre el Carnaval glorioso: ?Los vecinos de esta pueblo desconocíamos la diversión del Carnaval, que tanto alegra y divierte a otros.

                    La juventud asistía en gran número al jubileo que en la parroquial se celebra.

                    La única distracción eran los animados corros, casi en su totalidad formados por braceros y algunos artistas de buen gusto.

                    Pudiéramos decir que suple a tal festividad, pero en forma rara y de procedencia desconocida la Pascua de los Morados.

                    Ésta se celebra en la de Resurrección, consistiendo en disfrazarse gran parte de los jóvenes con túnica morada y antifaz de la misma tela, y llevando un palo o bastón.

                    Así aprovechan algunos la ocasión de hablar a aquellas de sus más grata devoción y, sobre todo, los privados de hacerlo al descubierto o los que por primera vez pensaban abordar su pretensión.

                    Llegó el presente Carnaval, precedido de grandes lluvias, que hacían esperar una desanimación completa, aún dentro de la rutinaria costumbre del corro y el cantar; pero los tiempos cambian, los deseos se avivan, surgen las imitaciones, y el Carnaval se presentó en nuestro pueblo.

                    La idea fija en el adelanto de las grandes poblaciones, el deseo de imitación, la presunción de una transformación que con la diversión aúne las amistades y con estas se realicen sus sueños dorados, hacen que la perspicacia de la mujer bella y honesta acierte a conseguir la transformación.

                    Y en Carcabuey surge el Carnaval. Bellas y simpáticas muchachas de la democracia, de esas que, sin ascender al detalle y exigencias, siempre engorroso, de la alta aristocracia ocupan sitio rodeado de moralidad y simpatía señorita Visitación Nocete.

                    No es muy amplia; pero el gusto con que está adornada, sobresaliendo los cuadros de paisajes que ella, con su exquisito gusto artístico, ha pintado, la hacen admirable.

                    Llegó la noche y una decena de alegres golondrinas enmascaradas, rebullían y alegraban el local con sus graciosas y encantadoras ocurrencias, dirigidas a los jóvenes que, deseosos de acompañarlas, las seguían.

                    Hubo baile de máscaras y, el Carnaval se inició. Nada hemos de decir del resultado, pues todo fue admirable.

                    Llegó el domingo de Piñata. Verificóse el sorteo de los mozos del actual reemplazo, y tuvo la fortuna de obtener el número mayor el aficionado al toreo Rafalito Montes, conocido por el Niño de la Audiencia, que disfruta de grandes simpatías, es de familia acomodada y tiene tres hermanas jóvenes, hermosas y de trato amable y cariñoso.

                    Hubo que festejar la buena suerte, y el Niño de la Audiencia, con sus amigos, prepararon un baile en el domicilio de aquél.

                    Unas veinte bellas y simpáticas jóvenes, vestidas con el mayor gusto y elegancia, ocupaban el local.

                    Asistieron, a más de las hermanas del agraciado, las señoritas de Ruiz Torres y Ruiz Molina, Visitación Nocete, Victoria Marín, de Marín Vida, Bermúdez Rey, Cabezuelo Caracuel, Caracuel Moreno, Montes Castro, Rodríguez Linares y Sicilia.

                    Una orquesta amenizó el baile.

                    Se repartieron caramelos y otros dulces y licores exquisitos?.

         Hasta quince años después no aparece otra referencia a esta Pascua y ahora unida a la celebración de la Semana Santa. El corresponsal, R. Marín, se queja de las siete y ocho mil pesetas que se gasta el pueblo en confetis y serpentinas, dato por estos años absolutamente extraordinario, y del que podemos deducir la importancia de esta fiesta: ?Celebrada en esta villa con la mayor solemnidad, las correspondientes fiestas y oficios propios de Semana Santa, y tradicionales procesiones, y nada extraordinario, digno de relieve puede anotarse.

                    Lo que sí merece, públicamente, sumamente loable y digno de alabanza por quienes tienen como norma de católicos el deber de hacer lo que ha sido el cumplimiento de la Sagrada Comunión, que más de... operarios que prestan sus servicios en la casa Serrano Galisteo, acompañados de sus patronos don Juan Bautista Galisteo Pérez, don Francisco Serrano Galisteo se efectuó en la parroquia con la mayor unción y compostura.

                    Habían sido convenientemente confortados y preparados para tan trascendental acto por el celoso e incansable coadjutor Ángel Carrillo Trucio, el cual con la antelación debida, a todos impartió varias conferencias durante viernes y sábado, realizándose el solemne acto el domingo de Pascua a las nueve de la mañana, en la iglesia parroquial, que para satisfacción de todo buen cristiano pudimos contar y comprobar por las hojitas repartidas, ascender a más de 300 personas que tuvimos la dicha de recibir en nuestros pechos el Pan de los Ángeles, el mismo domingo.

                    También han cumplido con el divino precepto los operarios del gran hacendado de este pueblo don José María Serrano Sánchez, en número bastante considerable.

                    Terminada la comunión y misa fueron invitados a una gran paella todos los ya expresados en la huerta de la fábrica San Sebastián, propiedad de los referidos señores Galisteo Serrano, donde la mayoría de los reunidos prestan diariamente sus servicios, sirviéndoseles abundantes vinos y postres, y reinando la mayor cordialidad y fraternidad entre patronos y obreros.

                    También ha finado hoy la Pascua,  más bien Carnaval en este pueblo con animación asombrosa, y con incalculable derroche de confetis y serpentinas, impropio de un pueblo de esta categoría, sólo viéndolo puede apreciarse y creerse; de siete a ocho mil pesetas en cosa tan inútil, cuando tanto bien pudiera hacerse con la humanidad necesitada. Me refiero a los excesos, pues ya sé que no sólo del pan vive el hombre, lo dijo Dios.

                    Nuestra más cordial enhorabuena a tales patronos y no menos dignos obreros y que perseveren en tan buenas prácticas.

                    Finalmente, durante los años republicanos, nos enteramos de las tensiones surgidas entre progresistas y conservadores con motivo de las coplas críticas de unas murgas formadas por trabajadores: ?Señor Director de EL SUR.- Córdoba.- Estimado camarada: El Centro Obrero de Trabajadores de la Tierra de Carcabuey le ruega dé cabida en las columnas de su periódico a las cuartillas siguientes: Con motivo de haber aparecido derribada una de las muchas cruces del Calvario de este pueblo, han sido detenidos tres camaradas de ésta completamente inocentes del hecho y conducidos esposados al cuartel de la Guardia civil, encerrados en la cuadra del mismo y uno de ellos maltratado por el guardia Trillo de palabras y obra.

                    Hoy han sido trasladados a la cárcel de Priego, esposados y en conducción ordinaria, oponiéndose los guardias que los conducían a que les facilitaran el socorro.

                    Ponemos el hecho en conocimiento de los trabajadores de la provincia, puesto que no confiamos en la justicia burguesa y protestamos de la actuación del jefe de puesto, hombre de espíritu jesuítico, que pasa más horas en la iglesia ?donde pernocta algunas noches- que en el cuartel, y para él todo ciudadano honrado que sea republicano o de izquierdas, es poco más o menos un bandido. Dicho guardia parece que trata de ejercer las funciones de la Inquisición, en el cuartel.

                    La detención de estos camaradas obedece a las sugestiones de los elementos clericales y fascistas de Acción Popular, de los cuales dicho brigada recoge los informes.

                    Estos camaradas, durante las fiestas de Carnaval, que en este pueblo se celebran pasada la Semana Santa, organizaron una murga con cuyas coplas ridiculizaron a los monárquicos fascistas de este pueblo y a las limosnas que repartían, consistentes en unas colas de bacalao y un puñado de garbanzos duros. Desde entonces el odio de esta clericalla repugnante, amparada por dicho comandante de puesto, contra nuestros camaradas, no ha cesado y según rumores han utilizado a unos provocadores para que derriben la cruz y cebarse en nuestros compañeros.

                    Todo el pueblo laborioso y trabajador de Carcabuey está indignadísimo por los hechos y comenta la actuación del jefe jesuita de la Guardia civil, que va a dar lugar a que se repita un segundo Casas Viejas.

                    Suyo y de la causa obrera. R.S.T?.

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