POESÍA DE ENRIQUE ALCALÁ ORTIZ - A ritmo de muecas
18. MONOLOGO

© Enrique Alcalá Ortiz



Dice que ya está cansado y que se marchará un día

a coger en la sabana plumas de avestruz.

Que está harto, que no aguanta por más días

ese monte de ballena que tiene por jefe, esa testuz

que le manda cada día incesantemente a reventar.

Que se hará una choza de bambú

donde dormirá las siestas.

Así se curará en salud.

Que quiere dejar la fábrica

y colgar en la percha el mono azul

que le hizo, a puntadas, su esposa.

Quiere tener la fama del andaluz,

no tener horarios ni normas

y por paga su libre actitud.

Extraña paga si se mira.

Se ve que ha perdido la luz

de los miles de empleados

que viven su cegadora esclavitud

sin planteársela ni discutirla

dentro del torso de un mamut

y que acuden aborregados al trabajo.

Para poder dejar esta cruz

hay que tener agallas de hierro,

no sirve para nada el tul.

Los que le oprimen y explotan

dicen que es un gandul.

Puede ser..., de jaspe no ha de tener los ojos

si se quiere ir al sur.

 

Aunque desea liberarse

el pobre trabaja aún.