POESÍA DE ENRIQUE ALCALÁ ORTIZ - Piscina de otoño
05. EL BESO DE LA TARDE

© Enrique Alcalá Ortiz



 

         Nunca acabaré por entender

 por qué el beso de la tarde

 pone rojo al sol del ocaso.

 

Un día intenté,

-en una acción disparatada-

arrojarle agua para amortiguar

el rubor de su desaparición.

Sólo conseguí mojar

el reflejo comprimido

de mi descompuesta mirada.