Poemas a Priego - Poesía
NOCHEBUENA
El sacerdote prieguense Domingo Arjona Casado evoca estas entreñables fiestas

DOMINGO ARJONA CASADO



 

Nochebuena, eterno arcano

con quien la fe se combina;

deja, que en tu luz divina

se inspire el candor cristiano.

 

Deja, que al sentir tu bien

y al par que de gozo llore,

de rodillas conmemore

las delicias de Belén.

 

Deja, que a ofrecer amores

al niño Dios inmortal,

vaya al humilde portal

en unión de los pastores...

 

Brillando sobre mi frente

estrella tan placentera,

yo sabré cruzar la esfera

como los magos de Oriente.

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Mas, ¿quién borda estas umbrías

de rutilantes topacios?,

¿quién satura esos espacios

con tan dulces melodías?

 

¿Por qué esos cantos sinceros

únense en estrecha pauta

con el rabel y la flauta

de esos pobres ganaderos?

 

Cualquiera diría con todas

las bellezas de tu anhelo,

que hoy, la tierra con el cielo

celebra perpetuas bodas...

 

Y es, que Jesús, sol fecundo,

nace a esta triste mansión,

y con Él la redención

de los pecados del mundo.

 

Por eso un ángel locuaz

canta brindando venturas:

¡Gloria a Dios en las alturas

y al hombre en la tierra paz![1]



[1] Adarve, 22 de diciembre de 1957, número 273-274, página 12.