José Serrano Burgos
Al sur de mi Córdoba querida
hay montañas con lindos hondos valles,
y en meseta, más bella no la halles,
está Priego, ciudad que vive la vida.
La visitas, viajero, y te convida,
contemplando el barroco con detalles,
pasear, por morunas, blancas calles,
y asomarte al Adarve en su salida.
Por el agua y por fuentes es famosa,
por sus huertas y frutos ideales,
por sus villas y recreos soñadores.
Pero más que por todo será hermosa,
por sus hombres labriegos e industriales
que mantienen la fe, como señores.