Por José Campos Tallón
Como dama elegante
y moza fragante.
Como sumergido
y oculto de malos vientos
está mi pueblo.
Creo que es
ingenuo y bello;
quiere sonreír y grita casi callado:
que haya paz,
que haya vida,
que haya perdón y olvido.
Sabe ofrecer lo mejor de su mies,
sabe compartir con viajeros,
sabe ayudar a crecer,
sabe lo que es mejor hacer.
No quiere lucha
y pelea con prudencia
queriendo que nadie pierda.
Priego cautivador,
así vas ganando amigos
y puedes
y debes
enseñar caminos.